viernes, 18 de junio de 2010

Naturalezas.

Hace apenas unos segundos estaba viendo un video en Youtube. No era un videoclip de una canción ni un tráiler de una película ni un capítulo de ninguna serie. Estaba escuchando una canción de Alejandro Sanz (concretamente la de "Si hay Dios", del disco "Más") y me ha llamado la atención un enlace a otro video. Ponía que era también la misma canción, así que he curioseado. Y me he encontrado ante un vídeo hecho con secuencias de una película llamada "Shelter" (en español significa "refugio"). Por supuesto, he visto el video por si me interesaba la película y me ha sorprendido ver que la película trataba la historia de dos chicos surferos que (según el video) acaban enamorándose. Era una historia bonita, según parecía. Después he visto otro enlace con otro video interesante. Esta vez sí conocía la película sobre la que estaba hecho el video: Brokeback Mountain. Aún no la he visto, pero me muero por hacerlo porque sale mi amado Heath Ledger (Rest In Peace... T_T). La cuestión es que tanto un video como otro, mueven algo dentro de mí.

La homosexualidad es algo que algunos, aún estando en pleno siglo XXI, no aceptan a día de hoy. Me parece fatal. Explicaré mis opiniones por partes.

En primer lugar, no creo que lo de ser homosexual se deba tomar como una moda, es decir, como una tendencia que debiera o debiese seguir todo el mundo asñi, de repente, sin más. Eso es algo que me resulta insultante en el sentido de que hace de esta característica algo que no se tome en serio. Uno/a no puede decir un día "Soy homosexual", y al día siguiente decir "Lo he pensado mejor y creo que me equivoqué y realmente soy heterosexual". Explicaré mi opinión sobre por qué pasa esto más adelante.

En segundo lugar, opino que eso de estar orgulloso de ser homosexual es otra bobada. Para mí, es algo parecido a decir "Sí, tengo los ojos azules y estoy orgullosa". Pues no, no tiene sentido. Es parte de la naturaleza de cada persona. Cada uno es como es y no hay que estar especialmente orgulloso de una de nuestras características en concreto. Vale, uno siempre debería estar orgulloso de sí mismo, de hecho es una señal de autoestima. Pero otra cosa muy distinta es ir gritándolo por ahí, eso me parece excesivo a parte de fuera de lugar.

En tercer lugar, eso de que "Gay/lesbiana se nace, no se hace" creo que es mentira. Señores, somos ya mayorcitos la mayoría para decir semejantes bobadas. Las personas somos al fin y al cabo animales, lo único que nos diferencia de los demás animales son los sentimientos y la razón. Y es eso, precisamente, lo que yo pienso que determina nuestras tendencias sexuales. Me explico. Desde el comienzo de los tiempos, todos sabemos que para que perdure una especie, es necesaria la unión sexual entre un hombre y una mujer. Sin embargo, a lo largo del tiempo hemos ido evolucionando, y con nosotros nuestra razón, nuestra forma de ver las cosas, nuestros propios sentimientos. Al ser necesario que hubiese ese tipo de unión entre ambos sexos, siempre se nos ha enseñado que las relaciones más íntimas deben darse entre un hombre y una mujer, es decir, es entre ellos donde deben anidar los sentimientos más profundos. Pero el ser humano es un ser de razonamiento inestable, de libre albeldrío (dentro de lo que cabe, claro), y por eso ha cambiado mucho su forma de ver el mundo que le rodea y los seres que le rodean. Entre miembros del mismo sexo sí se puede establecer una relación sentimental más fuerte que ninguna otra, más intensa que lo que hubiésemos podido imaginar. Las personas del mismo sexo se pueden amar perfectamente. Entonces ¿por qué imponer restricciones a este amor? Normalmente, las personas que piensan que estas relaciones no deberían permitirse o que no son "puras" o "correctas", son personas que se han educado en un ambiente estricto y hostil en cuanto a la libertad de expresión se refiere. La libertad de expresión es algo increíblemente importante. Yo personalmente considero que es algo que jamás se le debería negar a nadie. En los casos en los que esta libertad de expresión dañe física o psicológicamente a alguien, entiendo que quizás debería limitarse. Pero, por ejemplo, si hay dos chicas besándose apasionadamente en una discoteca, creo que no deberían ser observadas con cara de asco por nadie. Absolutamente por nadie. Y no por nada, sino porque seguro que si fueran un chico y una chica no pasaría nada. ¿Por qué al ser dos personas del mismo sexo la situación cambia? Me niego a sujetarme a esta tela de araña que la sociedad de otros tiempos ha ido tejiendo hasta la actualidad. Si estoy completamente enamorada de una chica, ¿por qué no puedo tener un gesto de amor con ella y besarla? No me parece justo. ¿Por qué tendría que esconderme? ¿Por qué daría mil vueltas a la cabeza hasta decidir cómo decírselo a mis padres? ¿Acaso no soy libre para amar? Son preguntas que muchas veces me planteo.

Por último, sé que alguna gente que lea esto puede estar pensando "Pero, ¿tú eres lesbiana?". Por favor, no entremos a trapo a tonterías. Ya comentaba antes que explicaría por qué hay gente que un día es homosexual y otro es heterosexual. Lo haré. Mi explicación es que todos somos bisexuales. No se sorprenda, señor/a. Usted también lo es. Para explicarlo, me basaré en una frase de una película (Mentiras y Gordas) y para ello les pondré una escena (aviso que no recuerdo si era exactamente así):

Hay dos chicas en un baño y una de ellas (más mayor y experimentada) besa a la otra (menor en edad y algo confusa). Inmediatamente, la chica menor dice: "Oye, que yo no soy lesbiana, ¿eh?", a lo que la chica mayor responde, mirándola a los ojos: "Yo tampoco. A mí me gustan las personas".

¿Qué conclusiones sacan ustedes de esto? ¿Ninguna? Pues miren, yo saqué una conclusión clarísima: no me gustan los chicos, ni las chicas. Me gustan las personas. Creo que el sexo es algo totalmente independiente de la persona. ¿Acaso una chica por ser una chica no me puede gustar o atraer sexualmente? ¿Por qué? No veo el problema. La persona en sí es completamente independiente del sexo que acompaña a su espíritu. Es su esencia lo que nos enamora. El sexo, al igual que el cuerpo en sí, es una envoltura sin importancia. Y sí, supongo que hay pruebas científicas claras que demuestran que los hombres y las mujeres tenemos cerebros muy distintos y hormonas muy distintas. Muy bien. Eso para mí no cambia nada. Me siguen gustando las personas. Sean chicos o chicas. Me da igual. De hecho hay chicas que me resultan atractivas sexualmente ¿y qué? Tengo novio y soy feliz con él, pero, al igual que a él le atraeran sexualmente algunas chicas (aparte de mí), a mí me atraen también.

No es una cuestión de tendencia, ni de elección, sino de naturalezas.

Nada más que decir, al menos por hoy. Sólo destacar mis derechos y mi libertad si algún día deseo expresar mis sentimientos hacia alguien de mi mismo sexo en público. Quiero que el mundo sepa que creo que puedo hacerlo. Y lo haré si llega el momento. Y que no me avergonzaré en absoluto, pero tampoco estaré orgullosa. Estaré sencillamente feliz y libre.

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