viernes, 4 de marzo de 2011

¿Conocido? ¿Desconocido?

Y le veo, tan lejano como una estrella pero tan cercano como el aire, tan imposible de alcanzar como el Sol, tan extrañamente ideal que no logro creer que exista de verdad. Tiene que tener algún defecto, seguramente tendrá más de cien, lo que pasa es que sólo puedo ver lo que él quiere mostrar. Nada más. Aún así, puedo leer en él cosas que no dice. Son pocas, por ahora, pero no está mal.

En realidad me da un poco de miedo pensar que está ahí, prácticamente al alcance de mi mano. Y es que el sólo pensamiento de que me vuelva a equivocar, me aterra. Además, tengo la rara sensación de que no lo conozco lo suficiente para decidir si quiero saltar a la piscina tan pronto. Quizás, deba seguir esperando, dejando el tiempo y las cosas pasar poco a poco. Sin embargo, es fácil decirlo pero no hacerlo porque hay muchas veces en las que la ansiedad por verlo me quema, y hay otras veces en las que necesito saber más, mucho más sobre él. No se puede descubrir a una persona en apenas dos meses, pero poco a poco, creo que lograré conocerle y entonces supongo que será el momento de decidir.

Por ahora, sólo tengo esta extraña agonía por llevar más de una semana sin disfrutar de su presencia o de un saludo o de una mirada. Espero que mañana acabe terminantemente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario