Y tras un día intenso y agotador, me he regalado a mí misma un masaje de pies ambientado con música relajante de fondo, unos inciensos y la luz de una vela.
Ahora, ¡¡a dormir!!
Mañana más y mejor.
Hoy me siento muy feliz y satisfecha conmigo misma.
No hay comentarios:
Publicar un comentario